Una investigación realizada por el Royal Veterinary College ha determinado que la salud de los Pugs o Carlinos es muy diferente, en lo que a calidad se refiere, respecto a otras razas. Estos perros tienen el doble de probabilidades de padecer uno o más problemas de salud durante el año en comparación a otros canes.
El perro Pug no es un «perro típico» desde la perspectiva de salud
El Pug se ha convertido en un perro muy popular en las últimas décadas. No obstante, esto también ha servido para conocerlo mejor y descubrir una creciente preocupación por los problemas de salud de este animal, derivados de sus características físicas más destacables: cara plana, ojos saltones, tendencia y piel arrugada.
Es cierto que cada vez existe más conciencia sobre los graves problemas de salud de los Pugs, pero tras los estudios realizados recientemente, la magnitud de la crisis de salud en estos perros se ha hecho más palpable.
El Royal Veterinary College elaboró un estudio en el que comparó la salud de ejemplares aleatorios de más de 4.000 Pugs y alrededor de 21.800 perros de otras razas. Tras ello, se comprobó que los Carlinos tenían 1,9 veces más de probabilidades de padecer uno o más problemas de salud a lo largo de un mismo año en comparación a otras razas. Esto indica un estado de salud bastante deficiente, en general, del Pug.
Entre las patologías que mayor riesgo tienen los Carlinos de sufrir respecto a otras razas, se encuentran:
- El síndrome de obstrucción de las vías respiratorias braquicefálicas.
- Infecciones de los pliegues cutáneos.
- Ulceraciones oculares.
- Secreción del oído.
- Fosas nasales estrechas.
- Obesidad.
- Problemas de alergias en la piel.
- Dientes de leche retenidos.
- Sarna dermodéctica.
Los perros Pugs tienen un temperamento muy amable y eso los hace en una mascota maravillosa. Sin embargo, los expertos advierten que los propietarios deben considerar la calidad de vida que soporta el animal antes de adquirir a uno de ellos. Esto es así porque los datos de los estudios dictaminan que muchos Carlinos pueden tener una salud y bienestar gravemente comprometidos.
¿Habláis sobre esta realidad con los clientes de vuestra clínica veterinaria que tienen un Pug como mascota?
