Cómo prevenir la fatiga por compasión en veterinaria

Cómo prevenir la fatiga por compasión en veterinaria

Salud mental de los veterinarios

Debido a la pandemia por Covid-19, el término «fatiga por compasión» ha estado más presente que nunca. Y es que este es un padecimiento que sufre, sobre todo, el personal sanitario. En veterinaria es muy común también, por ello, os vamos a mencionar algunas de las claves que dan los expertos para prevenir la fatiga por compasión en veterinaria.

Fatiga por compasión en veterinaria: ¿qué es?

Se habla de fatiga por compasión en veterinaria para referirnos a un tipo de angustia emocional grave que puede afectar con frecuencia al veterinario y personal técnico y auxiliar en las clínicas veterinarias.

Este problema suele aparecer cuando la capacidad emocional del profesional queda muy desbordada intentando hacer frente a un compromiso de empatía con el paciente y su familia.

En veterinaria es habitual enfrentarse a muchas situaciones que pueden llegar a provocar fatiga por compasión. Por ejemplo:

  • El fallecimiento de los animales.
  • La tristeza de los propietarios ante esa muerte, ante la enfermedad de su mascota o por no poder hacer frente a un tratamiento.
  • Cuidar durante mucho tiempo de animales con enfermedades crónicas o incurables.

Además, no hay que olvidar la elevada carga de trabajo, que puede desembocar en el síndrome del quemado.

Consejos para prevenir la fatiga por compasión

Señales de la fatiga por compasión

Algunos de los síntomas más comunes de la fatiga por compasión en veterinaria son:

  • Agotamiento continuo, físico y mental.
  • Dificultad para dormir o, por el contrario, aletargamiento constante.
  • Desilusión ante todo en la vida.
  • Sentimientos de impotencia.
  • Dificultad para enfrentar la vida cotidiana.
  • Aislamiento.
  • Disociación en el centro de trabajo.
  • Dificultad para expresar sentimientos.

Si estás notando alguna de estas señales, no las pases por alto. Debes poner remedio, pues la fatiga por compasión puede acabar provocando problemas graves como la depresión, ansiedad o el abandono de la profesión.

Cómo prevenir la fatiga por compasión en veterinaria

Como en todo, la prevención es la mejor opción antes de notar cualquier síntoma que nos indique que algo no va bien.

Por ello, vamos a ver cómo prevenir la fatiga por compasión en veterinaria.

Lo primero que debes tener en cuenta es que va a ser muy necesario que aprendas ciertas habilidades para mejorar tu capacidad de adaptación ante las exigencias emocionales que supone la profesión veterinaria. Solo así podrás comenzar a integrarlas en tu día a día, no solo mejorando tu bienestar, sino facilitándote la resolución de cualquier conflicto y la comunicación con los clientes.

Tienes que empezar por ser consciente de que la situación está a punto de sobrepasarte o ha empezado a hacerlo teniendo en cuenta las señales mencionadas. Si es así, acepta la realidad y comienza a actuar.

Dicho esto, para saber cómo prevenir la fatiga por compasión en veterinaria, la Asociación Americana de Medicina Veterinaria da algunos consejos para ponerlos en práctica en tu autocuidado.

Tips para prevenir la fatiga por compasión en veterinaria
  • Toma una buena alimentación, realiza actividad física regular e intenta descansar las horas adecuadas.
  • Practica técnicas de relajación, como meditación o yoga.
  • Comparte tus emociones del día a día en la clínica con tus compañeros. Podréis celebrar los éxitos y pasar las penas mejor en grupo. Eso te ayudará a recordar que no estás solo en esto.
  • Tómate siempre un tiempo al día para estar a solas contigo mismo.
  • Practica lo que se conoce como «escritura expresiva». Eso supone escribir un diario durante unos 15-20 minutos todos los días, dejando reflejado en palabras escritas qué es lo que te causó estrés o tristeza durante la jornada.
  • Antes de salir del centro veterinario, haz un «lavado» simbólico. Por ejemplo, lávate la cara y las manos, pensando que con ello dejas atrás todo lo duro del día. De alguna manera, lo dejarás ahí y no te lo llevarás contigo a casa.
  • Aprende a decir «No» en el trabajo, estableciendo límites de horarios y de carga. Debes tener tiempo para ti, para desconectar solo, con tus amistades y familia.
  • Practica algún deporte o actividad que requiera concentración. Si te metes de lleno en ello, le darás un respiro a tu mente del trabajo.
  • Busca ayuda profesional si te sientes desbordado o desbordada por tus emociones en el trabajo.

En definitiva, la autoconciencia, la aceptación, los hábitos de autocuidado y el apoyo personal y profesional son la mejora forma de prevenir y combatir la fatiga por compasión en veterinaria.