Es cierto que, una vez escogido el tono de las comunicaciones de tu veterinaria, este debe ser empleado en todos los mensajes que trasmitáis, sea cual sea la plataforma. No obstante, hay que matizar. Y es que también es importante saber que cada canal tiene sus propias «normas» y habrá que amoldar un poco ese tono.
Comunicar según la plataforma
Es evidente que no es lo mismo comunicar en el canal de YouTube de tu centro veterinario que en la cuenta de Instagram.
Esto es muy simple de entender: el contenido que se ofrece en ambas redes difiere. Mientras que en YouTube se pueden subir vídeos con discursos extensos, profundizando en un tema, en Instagram funcionan los contenidos más concretos, como las fotos o los vídeos cortos. Por ejemplo, los Reels o las historias (entre otro tipo de publicaciones).
Los discursos lingüísticos
Además de que las propias plataformas requieren de unos contenidos determinados que hará que quizás el tono de los mensajes se adapte, hay canales que dan más pie a emplear un tono más informal y otros a un tono más formal.
Por ejemplo, redes sociales como Facebook o Instagram son mucho más abiertas y cercanas al público, en las cuales un tono informal encaja perfectamente.
Sin embargo, LinkedIn, al tratarse de una red de carácter más profesional, puede requerir un tono algo más formal.
No se trata de ser el «día y la noche» en los mensajes de un canal u otro, simplemente basta con cuidar pequeños detalles en la elección de las palabras.
Tipos de contenido
Un texto largo va a encajar mejor en un blog. Una noticia es mejor recibida en Twitter o Facebook. Un vídeo divertido, en Instagram y TikTok.
Aunque en todos el tono sea el mismo, precisamente por la cantidad de palabras que acompañen a las publicaciones, quizás tengas que realizar alguna modificación en el tono.
Lo importante, en cualquier caso, es no perder la esencia.
