A veces es más complicado decir que no a una tarea encomendada, aun estando hasta arriba de trabajo, que el desarrollo de ese trabajo en sí. No saber poner límites trae consecuencias muy negativas para nuestra salud,. Por ese motivo, hoy os queremos mostrar algunas técnicas que podéis tener en cuenta para decir NO en el trabajo veterinario sin sentir culpa.
El análisis previo
Hay muchas razones por las que cuesta decir NO en el trabajo veterinario.
Por ello, el primer paso para comenzar a decir NO en el trabajo sin sentir culpa es usar el método DOC para saber si realmente merece la pena dedicarle tu tiempo o no.
D. La DISTRACCIÓN del trabajo cotidiano
La primera cuestión a considerar es si la propuesta de trabajo va a quitarte tiempo de las responsabilidades regulares de tu trabajo veterinario.
Si es complementario y posible, perfecto, pero si te va a desviar de tu tarea central, entonces quizás no deberías aceptar.
O. Los OBJETIVOS relacionados
Dentro del equipo veterinario se suelen establecer ciertos objetivos para los empleados que caminan hacia un objetivo final general.
Cuando se te pida una nueva tarea, pregúntate si esta se encuentra alineada con alguno de tus objetivos. Si va a ayudar a ello, entonces puede que merezca la pena aceptarla. Si no es así, entonces no.
C. CONSIDERACIÓN de las ventajas
Imaginemos que la petición no coincide con tus objetivos, pero, ¿hay algún otro aspecto relevante por la que podrías aceptarla? Puede que quieras asumir nuevas responsabilidades y este encargo te va a permitir demostrar tus habilidades. O un aumento de sueldo considerable. O vas a aprender algo nuevo que te servirá en el futuro.
Sin embargo, si no encuentras ningún aspecto positivo, ¿entonces para qué vas a hacerlo?
Técnicas para saber decir NO en el trabajo
Lo más importante a la hora de decir NO en el trabajo y no sentir culpa es hacerlo con asertividad. Veamos algunas de las técnicas que puedes tener en cuenta para ello.
La técnica del sandwich
Igual que este tipo de comida, esta estrategia está compuesta por tres partes.
- Cuando se haga la propuesta debes introducir el tema de forma empática, dando las gracias a la persona por haber pensado en ti para la tarea.
- Luego, pasarás al fondo del asunto, comunicando la negativa hacia su invitación de manera asertiva y breve. Por supuesto, puede añadir la razón que justifique esa postura: tienes tareas acumuladas, necesitas llegar pronto a casa, te encuentras mal…
- Por último, cierras el sándwich (la conversación) con otro comentario positivo que deje con buen sabor de boca a la otra persona.
Por ejemplo: «Te agradezco la confianza depositada en mí para esta tarea. Sin embargo, hoy tengo citas hasta la última hora y aceptar esto me supondría un retraso en otros compromisos. Si a finales de semana tengo más tiempo libre, es posible que pueda echarte una mano».
El banco de niebla
La siguiente de las técnicas para decir NO en el trabajo es la del banco de niebla. Esta consiste en mostrar acuerdo con el interlocutor de primeras, aunque luego vayas a añadir el NO.
Esta estrategia suele emplearse cuando se sabe de antemano que la negativa va a afectar a la otra persona.
Por ejemplo: «Me parece genial y muy necesario que nos sentemos para hacer un brainstorming, pero hoy me es imposible».
El disco rayado
Para llevar a cabo esta técnica hay que estar muy convencido de querer dar una negativa, pues se emplea cuando la persona proponente no para de insistir y no le vale un solo NO.
Para ello hay que mantenerse muy firme ante la negación, usando la misma premisa hasta que nuestro interlocutor se dé finalmente por vencido. «Lo lamento, pero no puedo», «Lo siento, pero me es imposible», «Entiendo lo que me pides, pero no es el momento».
La alternativa
Otra de las técnicas para decir que NO en el trabajo veterinario sin sentir culpa es la estrategia de la alternativa.
Esta consiste en dar opciones a la persona que nos quiere encomendar la tarea. No obstante, para usar este método hay que tener claras varias cosas:
- Si vas a proponerle que se lo pida a otra persona, debes saber con certeza que esa persona va a poder ayudar. No se trata de pasarle la carga sin más.
- Si vas a ofrecer otra solución o modificar ciertas condiciones, tienes que estar seguro de que podrás y querrás hacerlo.
Estrategia del aplazamiento
Quizás necesites dar un NO como respuesta en el trabajo en este momento actual, pero puedes tener disposición de hacerlo en un futuro.
En ese caso, decir que NO es mucho más sencillo, puesto que es una negativa relativa.
Sabemos que es muy complicado, si no, no hubieses llegado hasta aquí. Pero imposible, no. Tan solo por las consecuencias negativas que supone para tu salud sobrecargarte de trabajo, debes comenzar a poner ese límite.