Ser una Persona Altamente Sensible implica tener unas capacidades neurosensoriales mucho más altas que las de la mayoría de las personas. Eso supone captar estímulos mucho más sutiles y otra serie de características que, en combinación con la realidad del día a día veterinario, pueden dificultarlo. Por ello, en esta ocasión queremos hablaros de los aspectos básicos para sobrellevar ser una Persona Altamente Sensible en veterinaria.
Cómo afecta ser una Persona Altamente Sensible en veterinaria
Una PAS que se dedique a la profesión veterinaria puede acabar muy abrumada al finalizar el día.
Esto no solo se debe a que el volumen de trabajo le puede llegar a angustiar mucho más que a otras personas. También es porque son mucho más sensibles a los ruidos y a los olores fuertes, algo que suele estar presente en los centros veterinarios.
Además, la empatía, que es una característica muy común de los profesionales veterinarios, también se multiplica en las PAS, por lo que las reacciones de los clientes y la situación de las mascotas pueden afectarles más.
Consejos para sobrellevar ser una Persona Altamente Sensible en veterinaria
Al tener un sistema nervioso mucho más sensible, el profesional veterinario se puede ver muy sobrepasado por el agotamiento con mayor facilidad.
Por ello, los expertos aconsejan que, para sobrellevar ser una Persona Altamente Sensible en veterinaria, se ponga la atención en tres factores fundamentales: el autoconocimiento, la autoaceptación y la autogestión.
- Debes conocerte a ti mismo, ver qué cosas son las que más te afectan en tu día a día en el trabajo. Este es el primer paso para aprender a gestionarlas.
- Acepta tu condición de PAS. Esto no se trata de una patología. Es una condición que afecta al 15-20% de la población y que no le pase a todo el mundo, no significa que sea un problema. Así que empieza por aceptarte. Además, el problema normalmente viene de la sociedad, que obliga a una PAS a negar su sensibilidad, haciendo comentarios como «exageras», «tú mismo te complicas», etc.
- Comienza a ejercitar tu mente y tu cuerpo para encontrar una nueva sensación física y mental más positiva al salir del trabajo tan saturado.
- Empieza a establecer límites para evitar tu saturación. Aprender a decir «no» en veterinaria siempre es fundamental, pero lo es aún más para sobrellevar ser una Persona Altamente Sensible en veterinaria.
- Busca ayuda profesional. Aprender a manejar las emociones no siempre es fácil, pero hacerlo antes de que la angustia se apodere de ti es crucial. Para ello, lo ideal es que busques ayuda profesional. Te ayudará a aprender a gestionar esas emociones y a canalizarlas.
Por mucho que adores tu profesión, sabemos que el día a día en la clínica no es siempre es fácil. Si a eso se le suman unas condiciones personales que hacen que las sensaciones se multipliquen, todo se puede complicar.
De ahí que sea tan importante aceptar tu condición de PAS y aprender a gestionarla. Como no se trata de una enfermedad, no se puede hablar de cura, pero sí de una mejor gestión. Y puedes hacerlo si te lo propones. ¡Que nada te impida disfrutar de un trabajo tan bonito!